Rocío Nahle en crisis: ¿Abandonará la precandidatura ante el descontento y el repudio en Veracruz?

Redacción de Esquife | Una profunda crisis sacude los cimientos de la campaña de Rocío Nahle, quien enfrenta serios obstáculos en su precandidatura a la gubernatura de Veracruz. Los corredores del cuartel general de Nahle murmuran la posibilidad de que abandone la contienda ante el escaso impacto en el electorado y el creciente repudio y burla en el estado.

Los problemas para Nahle son evidentes: las encuestas no le favorecen, persiste un repudio generalizado por su origen y su falta de carisma, y su ostentación y arrogancia no despiertan simpatía en los pueblos y ciudades que visita. Mientras tanto, Pepe Yunes ha experimentado un ascenso meteórico, situándose conservadoramente 10 puntos por encima en las encuestas internas de Morena a tan solo tres semanas de la precampaña.

Incluso el gobernador Cuitláhuac García mantiene distancia, y los operadores de Nahle, como Huerta, Zenyazen y Gómez Cazarín, no solo se confrontan entre ellos sino que también comienzan a alejarse. Todo esto no pasa desapercibido para el presidente López Obrador, quien ve en riesgo la tercera reserva electoral y, con ello, la gubernatura de Veracruz.

La pérdida de la entidad no solo significaría un golpe para Morena, sino que también afectaría la línea de flotación de Claudia Sheinbaum, quien confiaba en que Nahle conservaría los 2 millones de votos a favor, e incluso aumentaría esta cifra, según las estimaciones internas de Morena.

La oposición, liderada por Pepe Yunes, parece tener asegurados 2.7 millones de votos, sin contar posibles adhesiones debido al descontento ciudadano. La posibilidad de reemplazar a Nahle con Manuel Huerta o Ricardo Ahued enfrenta desafíos, dada la fama pública y problemas locales de ambos. La opción de Zenyazen se presenta complicada debido a la división y polarización interna en las filas de Morena.

La confusión y el caos en la casa de campaña de Nahle ya trascendieron a nivel nacional, generando preocupación sobre la viabilidad de la candidatura. La creciente unidad opositora ha identificado las debilidades de Morena, y la incertidumbre sobre la permanencia de Nahle en la contienda parece depender ahora de la decisión de López Obrador, quien enfrenta el reto de cambiar de caballo a mitad del río en busca de un candidato que pueda hacer frente al crecido Pepe Yunes.