Culpabilidad de García Luna es CATASTRÓFICA

Con información de Irwing Gatell

La declaración de culpabilidad de García Luna en los 5 cargos que levantó en su contra la fiscalía de NY es catastrófica e inesperada. Y el que más debería preocuparse a partir de este momento es López. Te voy a explicar porqué:

El veredicto era inesperado porque, independientemente del festín mediático que se están dando los chairos, la realidad es que la exposición de la fiscalía y de los testigos dejó mucho que desear, y no valía ser considerada como algo que no dejó lugar a dudas.

En muchos casos, la defensa hizo un buen trabajo al enfatizar que había testimonios pero no evidencias, e incluso en hacer que los testigos se contradijeran. El objetivo era claro: evitar que el jurado lograra la unanimidad a la hora de dictar el veredicto.

Eso, por supuesto, no significaba que García Luna fuese inocente, y SIEMPRE se señaló de ese modo. Sólo significaba que la fiscalía tenía un caso endeble, y le iba a costar mucho trabajo convencer al jurado de que, por unanimidad, lo condenaran de todos los cargos.

Además, la deliberación del jurado fue demasiado larga para tratarse de un criterio unánime. Por ello, la gran mayoría de los analistas serios consideraban que lo más probable era que García Luna librara las peores acusaciones. ¡En serio!, era lo más lógico…

Por eso, la decisión tomó por sorpresa a todos los que habían estudiado la situación a fondo. Obviamente, lo más odioso es que en este momento el lopismo se puede dar un festín, y van a estar jode y jode con su cantaleta infantil y obtusa.

Lamentablemente, pueden sacarle jugo a su narrativa. Y es que ahí está el problema: el lopismo está hecho de relatos, no de HECHOS ni de EVIDENCIAS. Por eso, la actual coyuntura les basta para ser felices. Pero deberían preocuparse. ¡Y mucho!

Lo que queda claro con esta inesperada unanimidad del jurado es que Estados Unidos parece decidido a empezar a apretar a México en materia de narcotráfico. Y aquí es donde empiezan los fallos de López y sus focas. La semana pasada ocurrió algo bastante grave: En una comparecencia ante el senado estadounidense, Anne Milgram -directora de la DEA- criticó abiertamente al gobierno de México porque no está haciendo lo suficiente en la guerra contra el tráfico de drogas, especialmente de fentanilo.

Un punto que Milgram enfatizó fue que México ya no se comporta como entre 2012 y 2015, cuando se atacó y se desmanteló a los Zetas. Dijo, de manera explícita, que México debería volver a aplicar esa política, esta vez contra los cárteles de Sinaloa y de Jalisco NG.

También señaló que México debería capturar y extraditar a más narcos, y de paso se quejó de que México ya no colabora con información, ni deja operar a la DEA del modo que antes se hacía. En resumen, dijo que el gobierno de México está dejando crecer a los cárteles del narco.

¿Se dan cuenta de la conexión que hay entre todos estos señalamientos y el veredicto contra García Luna? Para el gobierno estadounidense está claro que la complicidad del gobierno con el narco no fue un asunto de un sexenio (el de Calderón), sino que CONTINÚA vigente. 

Y la inesperada intransigencia del jurado en el caso de García Luna, evidencia también que Estados Unidos está empezando a endurecer su política hacia México, caiga quien tenga que caer. No existe ninguna garantía de que vayan a tener consideraciones con López y su gente.

Muy probablemente, Biden va a esperar a que termine la gestión de López. Eso incluso significa que los próximos pasos agresivos los dé el siguiente gobierno, porque Biden terminará su propia gestión unos pocos meses después. Eso, por miedoso y tonto (Biden).

Está muy claro que Biden ha preferido ser amable con López, esperando que de ese modo México coopere con el asunto del control migratorio, un tema que puede poner en jaque a Biden y hacer que los demócratas pierdan la elección de 2024. 

Pero esa paciencia se va a acabar, y lo de García Luna ya fue un anticipo. Con López fuera del poder, ningún presidente de USA tiene la necesidad de seguir siendo amable con él o con sus familiares y amigos. ¿Qué pasaría si la fiscalía acusa a López de apoyar al narco?

Esta situación empeoraría sustancialmente si la presidencia de USA la gana el partido republicano. Una de sus banderas en las campañas electorales va a ser la evidente debilidad de Biden a la hora de enfrentar todos los problemas que representa el narco mexicano. 

Imagínate un juicio como el que vimos con García Luna, con la sensible diferencia de que allí sí podrían presentar un montón de evidencia en videos, fotos y documentos, que demuestran que López ha sido el presidente con mayor cercanía al crimen organizado.

No fue nada más García Luna el que quedó exhibido como cómplice de narcotráficantes. No fue nada más el sexenio de Calderón. Fue EL ESTADO MEXICANO, de principio a fin. Y López no ha hecho ABSOLUTAMENTE NADA para que eso cambie. Al contrario. Sistemáticamente, su política ha sido facilitarle la vida a los cárteles. Algo fácilmente demostrable si se llega a un juicio en su contra. Los Estados Unidos no parecen dispuestos a tenerle más paciencia a México. Por eso García Luna irá a la cárcel. 

Y eso, curiosamente, al que más debería preocuparle no es a Calderón, sino al presidente que no ha escondido su abierta complicidad con el crimen organizado. Y ese es López Obrador.

Al tiempo.